Hay a quien le dan PAN y llora…
Vivir fuera del presupuesto, es vivir en el
error.
Así dijo un político de hace muchos años en
nuestro país, o por lo menos se lo achacan.
Y esa lapidaria frase llegó para quedarse, en
particular entre los jóvenes profesionistas que al terminar la Universidad no
encuentran más opciones y, pues terminan seducidos por la bondades de esa
gorda, fea e inoperante burocracia.
¿Y con esos
sueldos quién deserta?
¿Y a quién
le dan pan que llore?
¿Y quién no
quisiera tener dos trabajos o, por lo menos dos ingresos?
Y si los
Regidores, con sus sueldazos, no están de tiempo completo, ¿quién supervisa a
los jefes y directores que cumplan con sus horarios?
Hay muchas razones por las cuales podemos
señalar la falta de cumplimiento de las metas de los gobiernos, no solo el de
Tepatitlán.
Con la autorización, este jueves, de los días
feriados del calendario 2014 para los empleados del Ayuntamiento de Tepatitlán,
nos han provocado a reflexionar sobre la productividad y rentabilidad de esta
parte del gobierno. Me explico:
Los empleados del gobierno municipal acuden a
oficinas (debiera decir trabajan) de lunes a viernes, es decir 5 días a la
semana. Pero, una vez cumplidos 6 meses pueden disfrutar de 20 días hábiles de
vacaciones, que sumados a los fines de semana y los 15 días feriados que les
han autorizado este jueves, los burócratas trabajarán sólo el 61% de los días
del 2014.
Es absurdo pensar que una empresa –pública o
privada- pueda operar adecuadamente cuando sólo “se les permite” laborar el 61%
de su capacidad. Imagine usted que pone una tiendita de abarrotes, que contrata
a 10 empleados, que les pone horarios de 8 a 4 de la tarde y que sólo podrán
rendir el 61% de su capacidad. A cambio, deberá Usted como patrón cumplir con
el 100% de sus obligaciones.
No se puede avanzar con esas cifras, con esa
modorra.
Si a ese porcentaje de “productividad” le
restamos las horas que se pierden en desayunar, en checar correos, en
“capacitaciones”, en “ir por los hijos”, en “ir a Presidencia”; la actividad
productiva del Ayuntamiento está por los suelos.
Es inusual el estilo laboral del municipio.
Con esas condiciones nuestra economía estaría quebrada. ¿O será por eso que
falta liquidez en nuestro pueblo?
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