Sin tiempo para Dios


Por el padre Miguel Ángel

Esta es la historia de un hombre que nunca encontró tiempo para Dios: 

1.- Cuando era niño quisieron enseñarle a rezar, pero alguien objetó: ¨Es muy temprano para pensar en Dios. Todavía no entiende nada¨. 2.- Cuando se hizo adolescente, les pareció bien mandarlo al catecismo. Pero enseguida alguien opinó: ¨Es muy niño para pensar en Dios¨. 3.- Cuando era joven, le llegó un encuentro de jóvenes. Estaba entretenido con su novia. Otros contestaron por él: ¨Muy enamorado para pensar en Dios¨. 4.- Cuando era un hombre adulto, ya casado, su esposa le pedía que fuese a misa los domingos, pero él le contestaba: ¨Estoy muy ocupado para pensar en Dios¨. 5.- En su pueblo hubo una santa misión. Quisieron despertarlo de madrugada para que participara en un acto penitencial, pero los amigos contestaron: ¨Dejénlo. Está muy cansado para pensar en Dios¨. 6.- En una ocasión, absorto por sus negocios, lo invitaron para hacer una confesión pascual. Pero él contestó: ¨Estoy muy preocupado para poder pensar en Dios¨. 7.- Cuando, ya muy anciano, quisieron llevarle un sacerdote a su casa para que lo visitara, los nietos objetaron: ¨Está muy viejo para pensar en Dios¨. 8.- Cuando lo llevaban al cementerio, el demonio soltó una carcajada en su cara diciendo: ¨Demasiado tarde para pensar en Dios¨. 

Hoy hay que decidirse por la vida o no.

Que ni a ti ni a mi nos vaya a suceder esto.

Hay que empezar ya, a hora antes de que sea demasiado tarde y eso mismo hay que procurarlo para nuestros familiares y amistades.


Cuántos hay que ya empezaron a acercarse a los sacramentos y a la Santa Misa y viven ahora más felices que antes.

Publicar un comentario

0 Comentarios