En Cañada de Islas
El 17 de diciembre de 2015 se festejaron los 40 años de una generación sacerdotal, la 1961-1976. La celebración fue en Cañada de Islas a las doce del día, en el hermoso Santuario de los Mártires de Cristo Rey. Los compañeros se reunieron en torno al rector del Santuario, Luis García León y al terminar la misa la encargada de los servicios de la sacristía, Mary Pérez tomó la palabra a nombre de la comunidad para decir:
“Esta mañana quiero dar la bienvenida a todas las personas que visitan este santuario en este día tan especial. A los sacerdotes cumpleañeros muchas felicidades y gracias por entregar su vida poco a poco al Rey Supremo que sabrá recompensarlos”.
Hablar de Cañada de Islas es hablar de una comunidad profundamente mariana, y de la mano de María vamos hacia el Padre, como dicen algunos padres de la Iglesia, esta es una comunidad que sabe querer y orar por sus sacerdotes.
Agradecimiento al padre Luis García
El óvalo del tiempo, como veloz golondrina sobre nuestras vidas pasa inexorable, arrancando una a una las hojas del calendario. Felizmente ha llegado el 40 aniversario y este último tiempo ha marcado la vida favorablemente en Cañada de Islas.
Padre Luis: queremos darle las gracias por aceptar vivir en este rincón alteño. Gracias por aceptar conducirnos espiritualmente. Gracias por tu entrega, a pesar de tus cansancios ocultos. Gracias por tu alegría ante la vida y por el ánimo que sabes inyectar, gracias por tu sabiduría compartida con nosotros cual lámpara de luz.
Padre Luis, gracias por tus regaños a tiempo, porque a tiempo son muy favorables. Gracias por la amistad que brindas a la comunidad de Cañada de Islas. Pero sobre todo gracias por ser como eres. Por todo, gracias Padre Luis.
Cariñosamente. Sacris. Mary Pérez.
Luego cantaron de esta manera:
Para empezar a cantar
pido primero perdón
si en las palabras que diga
haya equivocación.
Un 22 de diciembre
del año 75
el sacerdocio reciben
ungidos por el Espíritu.
Estamos agradecidos
por ser tan buenos pastores
en la Iglesia universal
son muy buenos servidores.
La Virgen, su madrecita,
del cielo los bendecía
meditando aquella gracia
que el Señor les concedía.
Siempre han sido mis deseos
pasen feliz este día,
que Dios los colme de bienes
también la Virgen María.
El Señor siempre los guía
y los cuida una Paloma
y les tiene preparada
en el cielo una corona.
¡Qué fecha tan señalada,
se agranda en el corazón,
que haya llegado a este rancho
esta gran celebración!
En este dichoso día
todo el pueblo deseará
sea feliz su aniversario
y una feliz Navidad.
Dios los llene de su gracia,
los cubra de bendiciones
para que pasen la vida
convirtiendo pecadores.
De las faltas que haya habido,
les pedimos el perdón
y también les suplicamos
que nos den su bendición.
De esta manera el pueblo celebra y agradece este año jubilar.
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