El peor de los virus es el miedo


Lic. Christian Villalobos

En los últimos días fuimos bombardeados por información relacionada a la pandemia mundial conocida popularmente como el Coronavirus COVID-19.

Las pandemias y epidemias son tan antiguas como la misma civilización, la primera de la que se tiene registro sucedió en la antigua Grecia. Durante siglos las pandemias se relacionaban con castigos divinos, esto llevaba a que se buscaran culpables, los cuales podían ser extranjeros, personas con otra religión, incluso el vecino y un largo etc.

Durante la edad media la peste bubónica o mejor conocida por su nombre de fama como “la peste negra”, arrasó con gran parte de la población. El temor a la muerte y a lo desconocido causo discriminación de los enfermos, persecución y muertes de inocentes. 

Conforme pasó el tiempo y las medidas de higiene fueron mejorando, así como la ciencia avanzó, algunas enfermedades tan temibles como la viruela que mataron a miles de personas actualmente se encuentran prácticamente erradicadas. 

Sin embargo, van surgiendo nuevas enfermedades que nos ponen a prueba, el COVID-19 no es la primera ni la última enfermedad que surgirá para desafiarnos. Por lo que es muy importante mantener siempre una cultura de la higiene, no solo cuando nos enfrentamos a contingencias. Ser muy conscientes de nuestra realidad, acatar las indicaciones que las autoridades en materia de salud nos indiquen y sobre todo tomar medidas personales para evitar el contagio.

Por vivir en un mundo globalizado, este tipo de situaciones nos afectan de forma más rápida y en distintos rubros incluyendo el económico. Por lo que debemos ser aún más precavidos y no generar compras de pánico o despilfarrar el dinero para evitar agudizar los problemas. 

Es de suma importancia que revisemos las fuentes de la información que llegue a nuestras manos, no caigamos en engaños ni compartamos información que pueda generar histeria colectiva.

No dejemos que el temor se apodere de nosotros, debemos demostrar con fuerza y con fe lo grande que es el pueblo de México, que siempre logra salir adelanté. Resistiremos con valentía como muchas otras veces. Esta es la oportunidad perfecta para unirnos aún más como sociedad.  Para cambiar nuestros hábitos que nos dañen y fortalecer aquellos que nos mantienen de pie.

No debemos molestarnos por algunas medidas que se han tomado, debemos entender que, aunque la pandemia en el país aún no se desata completamente, estas medidas son precisamente para evitar llegar a los extremos en los que otros países se han visto. 

Por lo que invito a los ambles lectores a reflexionar y ser precavidos. Pero sobre todo a sonreír al saber que como dijo Roosevelt en su afamado discurso, “a lo único que debemos temer es al miedo mismo.”  


    



Publicar un comentario

0 Comentarios