En Arandas
Arandas, Jal.- Cadáveres de cerdo sobre el suelo, expuestos, sin cubrir y con presencia de larvas en una granja porcícola, derivó en su clausura por parte de la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proepa), aunque esta será de manera temporal hasta que la granja en cuestión certifique que ha hecho los cambios pertinente para su apertura.
Durante la visita de inspección se observó un inadecuado manejo y disposición final de los residuos de manejo especial: cerdaza y cadáveres, ya que de la primera se dispone sin tratamiento previo sobre el suelo natural, con un escurrimiento hacia el exterior de la granja a partir de la fosa de contención; mientras que los cadáveres se encontraban sobre suelo natural expuestos, sin cubrir y con presencia de larvas; lo que podría ocasionar una posible contaminación del suelo y agua debido a la infiltración de los mismos residuos, lo que incumple con la normatividad vigente del Estado de Jalisco y para prevenir un posible daño ecológico.
Por ello se impuso la clausura parcial temporal como una medida de seguridad para prevenir un daño ecológico, esto con fundamento en el artículo 144 fracción I de la Ley de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, además de que la operación del establecimiento pudiera presentar un posible desequilibrio ecológico del lugar.
Sin embargo, la procuraduría aclaró que esta medida de seguridad permanecerá hasta en tanto se acredite realizar las adecuaciones necesarias para evitar la contaminación y el correcto manejo y disposición de los residuos así como el cumplimiento de los requerimientos para la fosa de cadáveres señalados en la NAE-SEMADET-004/2004.
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