Por Gustavo González Godina
Sé, de buena fuente, que hay dos personajes de Tepatitlán que buscarán ser candidatos a la Presidencia Municipal. Uno por Morena, el partido dominante en México (aunque me caiga gordo) y el otro independiente, sin partido, y aun así con más posibilidades de triunfo que el primero, pero los dos son buenos candidatos. Para que sus cuentas hagan los panistas y los de Movimiento Ciudadano…
Si Morena tiene o no una estructura partidista en el municipio, no lo sé; si tiene cuadros dirigentes, lo ignoro; si tiene militancia en Tepatitlán, supongo que sí, mucha o poca quién sabe, pero es de suponer que el partido en el poder en México, debe tener ya militantes en todo el país, no estoy seguro; lo que sí sé y estoy seguro, es que tiene a quien sería un buen candidato en la persona de José Guadalupe Lomelí.
¿Por qué lo creo así? Porque desde que lo conozco sé que es un hombre institucional, estudioso, de trabajo, respetuoso y congruente. Institucional porque hace tres años, cuando era el único que había trabajado por Morena, le dijeron que no sería candidato y aguantó vara, siguió trabajando por su partido; estudioso porque a pesar de ser un experto en Derecho Constitucional, no deja de actualizarse, hace poco acaba de ir a un curso invitado por una universidad de España; de trabajo porque siempre ha vivido de su trabajo (desde hace tiempo es defensor de oficio de la Federación) y ayudado a quienes lo han necesitado; respetuoso, porque me consta personalmente que lo es, a pesar de que yo columna tras columna arremeto contra López Obrador y contra Morena, al grado de afirmar que un voto por Morena es un voto contra México, Lomelí no deja de reiterarme su amistad y de ofrecerme su respeto. Digo, alguien que no respeta la posición y la manera de pensar de los demás, lo menos que haría sería mentarme la madre, Él en cambio hace todo lo contrario, respetar lo que digo y poner por encima la amistad; y finalmente, congruente porque a pesar de ser militante de Morena y su principal cuadro dirigente en la región, no está de acuerdo con la totalidad de la ideología de su partido, no aprueba, por ejemplo, el aborto y la ideología de género y lo dice abiertamente. Como dijo el periodista y escritor inglés Chesterton: Cuando entro a una iglesia me quito el sombrero, no la cabeza.
Es decir, el hecho de que por respeto al recinto religioso se quite uno el sombrero, no significa necesariamente que deje uno de pensar por sí mismo; podrá estar o no de acuerdo con lo que se predica en la iglesia, pero muestra su respeto aunque piense diferente. Así Lomelí, podrá pertenecer a Morena, pero sigue pensando por sí mismo y sosteniendo lo que le parece que está mal, aunque sea parte de la ideología de su partido. Pocos hombres se atreven a pensar por su cuenta y a sostener lo que piensan.
En una ocasión, en el restaurante que tenía Juan Ramón Martín Franco, mientras comíamos llegó un hombre joven al que no conocía yo, llegó a saludar a mi amigo Juan Ramón, y cuando empezaron a hablar de política, desembocó la plática en que el joven era morenista, le dije que yo no comulgaba con su partido. “Ya sé -me dijo-, incluso quería reclamarle por qué nos tira tanto en su periódico”. Digo lo que pienso nada más -le contesté- y respeto lo que usted piense de lo que digo. “Lo sé, lo sé -me contestó el joven-, era broma lo de que quería reclamarle, tengo muy buenas referencias de usted”. Pues -le dije ya para finalizar- si se lanza de candidato de Morena el licenciado Lupe Lomelí, yo lo voy a apoyar. “Ya está, es un trato”. Si tiene oportunidad dígaselo. “Se lo diré, esta tarde lo voy a ver”.
Y como lo prometido es deuda, ahora que sé que Lupe Lomelí buscará ser candidato a la presidencia municipal, tendrá mi apoyo. Si gana o no, eso ya será harina de otro costal, pero por falta de apoyo no va a quedar, en mi caso de mi humilde apoyo, si de algo le sirve lo vamos a impulsar.
Por supuesto que José Guadalupe Lomelí no es monedita de oro para caerles bien a todos, personas muy cercanas a mí me han hablado mal de él, pero lo que yo pienso de Él es lo que me consta. Dice un dicho: De lo que veo creo la mitad, de lo que me cuentan nada. Yo sólo he visto y me consta que Lomelí es una persona muy educada, muy estudioso, respetuoso y congruente, además de que conoce las carencias de Tepatitlán y tiene vocación de servicio, creo que haría un buen trabajo por Tepatitlán.
Por lo demás, ¿quién mejor que Lupe Lomelí para ser el candidato de Morena?, ¿quién merece la candidatura más que Él, que ha trabajado incansablemente por Morena? Hay un señor, me dicen, que se apellida Camarena Nario, que también quiere ser candidato y no de ahora, hace poco tres años quería ser candidato de Morena sin pertenecer a Morena, que porque tiene conocidos muy influyentes porque ha sido palenquero en las Fiestas de Octubre en Guadalajara y en las de Tepabril en nuestro municipio, es un gallero pues, venido a menos por cierto, que cree que en la política se puede resarcir de las pérdidas que ha tenido por algunos manejos poco acertados de los recursos que le han confiado los patrocinadores de las fiestas, en Tepatitlán -me dicen- ya quedó vetado para no volver a organizar las fiestas. ¿Quién es entonces Camarena Nario, para buscar ser candidato de Morena a la alcaldía de Tepatitlán? En merecimientos, nadie. Si su partido, Morena, no lanza como candidato a José Guadalupe Lomelí, habrá cometido un error, del que se arrepentirá porque no tendrá ningún avance en este municipio.
El otro aspirante a candidato, que no va por ningún partido sino como ciudadano independente, es el licenciado Ramón González González, el ex alcalde de todos conocido y de gratos recuerdos para casi todos. Considero que va a ser el más fuerte de todos, pero de Él hablaremos en la próxima entrega de esta columna.
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