Movimiento Progresista

Por Gustavo González Godina

Movimiento Progresista Ciudadano se llama el nuevo partido político que está en formación y que, como pasó con Morena, a pesar de ser nuevo podría ganar la Presidencia de la República en el 2024, pues su candidato será Marcelo Ebrard Casaubón.

Será nuevo como partido, mas no como movimiento, pues tienen trabajando ya varios años, por no decir que muchos, su antecedente es el Partido de Centro Democrático que lanzó a Manuel Camacho Solís como candidato a la Presidencia de la República en el año 2,000 y perdió, no sólo la presidencia, perdió hasta el registro y desde entonces se empezó a trabajar en un llamado Movimiento Progresista.

Después de esa derrota y de iniciado el Movimiento Progresista, Manuel Camacho fue diputado federal por el PRD, teniendo siempre a su lado a Marcelo Ebrard, que en esa ocasión (2006) dejó pasar a Andrés Manuel López Obrador como candidato del PRD a la Presidencia de la República. Como perdió AMLO, a la mala (según Él), ante Felipe Calderón, en el 2012 le volvieron a dar chance de que lo volviera a intentar y volvió a perder.

Si no se hubiera muerto Manuel Camacho en el 2015, el candidato del PRD a la Presidencia hubiera sido Marcelo Ebrard en 2018. AMLO la vio venir y por eso abandonó el PRD e inició su Movimiento Regeneración Nacional un año antes de la muerte de Manuel Camacho. Casi coincidieron pues en el tiempo el registro de Morena como partido y la muerte de Manuel Camacho Solís.

Llegado AMLO al poder, que se la debía a Marcelo Ebrard porque lo dejó pasar dos veces, regresó éste de su autoexilio en París (a donde se fue para evitar los problemas legales que le podrían causar los manejos del dinero en la construcción de la Línea 12 del Metro, sí, la misma que se cayó hace un mes y medio por la dudosa calidad de los materiales en la construcción de un puente), y se integró al gobierno de López Orador como figura principal, la única, casi, que le ha permitido al Peje sostenerse en el gobierno durante estos tres años.

En lo que se refiere al gobierno de López Obrador, son evidentes tres cosas, políticamente hablando: la primera es que el ocupante del Palacio Nacional no sirve para gobernar, no sabe hacerlo y no lo hace, no sabe tampoco mantener el control de su equipo; vaya, no sabe ni hablar, “es de que” o no ha tenido tiempo de superarse culturalmente, o es de que su “salut” no le permite hacer ya un esfuerzo por intentarlo. La segunda es que el gobierno de la 4-T es prácticamente Marcelo Ebrard, que lo mismo es Secretario de Relaciones Exteriores, que de Salud, que de Seguridad Pública, de lo que se necesite. Y la tercera: que a pesar de esto la consentida de López Obrador para relevarlo en el cargo es Claudia Sheinbaum, que ya es parte incluso de la familia, pues aseguran que es mamá de un nieto del Presidente.

Y Marcelo Ebrard lo sabe. Sabe que no es el elegido para la sucesión. Sin contar con que Morena ya no gana otra elección presidencial ni yendo (el Peje) a bailar a Chalma, el desgaste de la figura presidencial y de su partido, y la decepción de los electores por la falta de resultados en el gobierno son tales, que ni conviene siquiera ser el candidato de Morena en el 2024.

Se juntan entonces el hambre con las ganas de comer. Por un lado, la preferida de López Obrador para hacerla candidata de Morena es la Sheinbaum, y por el otro Marcelo sabe que abanderado por Morena ni Él ganaría. ¿Qué procede entonces?, retomar los trabajos del Movimiento Progresista para dejar el gobierno a tiempo, transformarlo en partido el próximo año o en 2023, y enfrentar a Claudia Sheinbaum por Morena, a Ricardo Anaya por el PAN y tal vez a Ricardo Monreal por el PRI y el PRD, o por su propio partido también, pero Marcelo Ebrard Casaubón va. Ahora sí que como dicen los del nuevo partido de Raúl Padilla en Jalisco, que se llama Hagamos (lo que el licenciado diga), ya nos toca.

El Movimiento Progresista tiene como segundo apellido en cada estado o región el nombre de cada estado o región, por ejemplo en Veracruz es Movimiento Progresista Veracruz, si usted lo busca en el Facebook así, le aparecerá en forma destacada y en el centro de la imagen del partido, la fotografía de Marcelo Ebrard, pero a nivel nacional es Movimiento Progresista Ciudadano y así será registrado como partido, no se sabe si el próximo año o hasta el 2023, según se vayan desarrollando los acontecimientos, ya se sabe que la política es sobre todo circunstancia, depende de…

-Oye pero… -le pregunté a uno de los dirigentes del Movimiento Progresista en Jalisco- ¿pueden juntar las firmas del 5 por ciento del padrón electoral, o el porcentaje que diga el INE para convertirse en un partido político nacional?

-“Las juntamos de un día para otro”, dijo.

-Y… ¿podrá sacudirse Marcelo la tutela de López Obrador? Porque todavía es el líder de Morena aunque no lo parezca.

-“Qué pregunta tan inocente (neta), el que se tiene que preocupar es López Obrador, por evitar que Marcelo Ebrard no lo deje pasar otra vez (a su grupo). Marcelo tiene la personalidad y el arraigo que se necesitan para ser presidente, tiene muchos seguidores (eso me consta), tiene la presencia y el porte distinguido, habla seis idiomas y es el más inteligente del grupo, Monreal no es pendejo, pero es más brillante Marcelo”

-Pues… la Catrina, digo, la Sheinbaum, va a tratar de hacerlo pedazos con la caída del puente del metro…

-“No pasa nada… se han muerto más, y asesinados, no en un accidente, y no pasa nada”.

Bueno, pues Marcelo Ebrard va. Y va también Ricardo Monreal, y muy probablemente Enrique Alfaro por MC, y Riki Riquín por el PAN, aparte de la Catrina de Posadas por el partido en el poder. No olvide usted este nombre: Movimiento Progresista Ciudadano.