La doble cara del mexicano

Tras 4 meses de estar de “turista” (si digo “de estar trabajando” y alguien de inmigración lee esto corro el riesgo de que me que me quiten la visa norteamericana) en los Estados Unidos de Norteamérica, “gringolandia”, he podido observar que el mexicano realmente es una persona con gran capacidad de adaptación, como todo buen animal. Aquí todos, desde que suben al auto, se sujetan el cinturón de seguridad incluso ordenan a su copiloto que hagan lo mismo, me da gusto ver que mis paisanos piensan en la seguridad de sí mismos y de su acompañante, un gesto muy generoso. También es algo fascinante que respetan los limites de velocidad, el “speed limit”.

Es bueno saber que piensan en que “alguien le espera en casa”. Algo que sí es impresionante, dado que el mexicano tiene una gran capacidad intelectual y de retención, es que en el momento de pisar tierra de “whites” ya no saben manejar. Sí, dejen aclaro este punto: en México todos manejan mejor borrachos, aquí borrachos ya no saben manejar, por lo tanto le entregan las llaves a alguien más para que maneje o telefonean a algún amigo o familiar para que los recojan.
Ahora bien, ¿que tal con lo de la basura, verdad que somos muy limpios? Jamás nos observarán arrojar algo por la ventana de nuestro vehículo, cuidamos muy bien el ambiente, ¡eh! ¿Y cómo es que piensan que podemos cruzar alguna “luz” en rojo?, nunca haremos eso, nosotros pensamos muy bien en las personas que van en otros vehículos probablemente camino a casa o con su familia, por ello no vamos a atentar contra su vida pasándonos un semáforo, perdón, una “luz” en rojo. Además de ello, sea la hora que fuere, siempre hacemos nuestro “stop” y disminuimos la velocidad a 25 m/h “when the children are present” o en “school zone”, como es correcto.
Sobre nuestros impuestos, ¿cómo se atreven a dudar? Claro que los pagamos, en cada paycheck quincenal que recibimos tenemos que aportar nuestros impuestos al gobierno para que nos presten buenos servicios a la comunidad.

Hablar del idioma, “you know”, nos parqueamos como se indica en los signs y la zona de personas con capacidades diferentes las respetamos. Hacemos una izquierda en la siguiente luz, en el primer stop make a right, wachamos muy bien que no venga el security, bajamos del carro y lo laqueamos muy bien.

¿Ofender al vecino? Claro que no, respetamos la privacidad, por ello las fiestas las terminamos a las 10 de la noche y la música no la tenemos con un alto volumen. A nuestros hijos jamás les ponemos una mano encima, a nuestra pareja menos la tocamos, los hombres son muy hombres.

Triste realidad para los mexicanos, ya que al llegar a tierra mexicana se les olvida todo eso: no usan el cinturón de seguridad porque son muy chingones para manejar y no les va a pasar nada. Manejamos a 180 km, total, si me agarra un federal le doy una lana y con eso la libro, borrachos manejamos mejor y ¿cómo voy a poner la ceniza de mi cigarro en el carro? claro que no, esa la aviento por la ventana, después el carro va a oler mal. Si en “gringolandia” les dan una infracción tendrán que ir a corte, si fue por manejar en estado de ebriedad tendrán que ir a sus correspondientes clases de AA, no se libran de los 500 dólares por bloquear la intersección o tus 341 por viajar sólo por el carril compartido.

Y en México con un billete de 200 pesos la libras de todo, amo a mi país pero que sistema tan corrupto tiene, allí los correctos sólo somos estúpidos que seguimos al pie de la letra las leyes y sus reglamentos.

Hablan el idioma ingles como dios les dio a entender, porque en México lo hablan muy bien, claro, en “tierra de ciegos el tuerto es rey”. Lo primero que deberían de hacer es ir a clases que se imparten en forma gratuita, pero después de 10 años en un país con otro idioma y no hablarlo como es debido, llegan a nuestro país sintiéndose que trabajan para la bolsa de valores, porque hasta el lavaplatos siente que tiene un empleo equivalente al de un alcalde en México, comparten departamento 8 personas (departamento con dos habitaciones) y llegan diciendo que viven en Newport Beach. Pobres mexicanos.

Atentamente
Una mexicana que vive en Newport Beach… bueno, a 5 minutos de allí.

Publicar un comentario

0 Comentarios