Magister dixit

La visión de cerca y de lejos

Por Iván Sánchez Oceguera

Es común escuchar diferentes teorías de conspiraciones hoy en día —que si son cortinas de humo; que son distractores para el público; que muchos medios están coludidos con los gobiernos para alzar el telón— en verdad dudo mucho que existan, aunque me divierte jugar con las especulaciones y debatir con aquellos que se aferran a las ideas, que si bien no puedo descartarlas, tampoco se pueden comprobar. Por lo mismo es importante tener la habilidad como ejercicio mental el tener dos tipos de visiones: la primera, la que afecta directamente en un entorno inmediato, y segundo, aquello que viene de fuera de nuestro círculo e indirectamente afecta nuestro medio.

En Educación precisamente esto pasa a menudo, los docentes estamos tan enfrascados en las faenas diarias que pocas veces conocemos lo que viene de lejos pero que tanto modifica nuestra forma de proceder y a la que tenemos que adaptarnos.

Gran parte de estos cambios se llaman “políticas públicas en educación”, pero vamos por partes: a los mexicanos nos cuesta definir la palabra política, que por general la identificamos como el quehacer cotidiano del político, de cualquier nivel, el Diccionario de la Lengua Española sólo recoge la palabra política para definirla como arte, doctrina u opinión referente al gobierno de los Estados, cuando en verdad la palabra encierra tres tipos diferentes de esferas de acción, ya que en otros idiomas están bien definidos pero en el nuestro no lo está.

Podemos entender la palabra “política” —primera esfera de acción— como las actividades humanas que tienen que ver con el gobierno, con las diferentes formas de gobierno y con el concepto de Estado, la “política” —segunda esfera de acción— se refiere a un plan de trabajo, programa político y principios para la gestión de algo en concreto, como por ejemplo podemos decir: una política pública para la educación y, la “política” —tercera y última esfera de acción— sería la palabra que se adaptaría a la descripción más común de política en el sentido de dedicarse a la política, o de hablar de política.

Definido lo anterior podemos entender ahora el significado de política pública, aquí viene la otra parte del debate, muchas de estas políticas corresponden a un ámbito internacional, generándose fuera del territorio y soberanía de México, aquí es donde entra nuestra visión de lejos, ver más allá, por donde llegan los compromisos que firman los representantes de los 32 Estados (Senadores) y que serán validos en el marco del federalismo educativo.

La propuesta es que miremos hacia el horizonte y podamos identificar que acciones vienen, es aquí donde quiero reflexionar, existe un documento desprendido de los objetivos del milenio declarado por la ONU (consultar en: http://www.objetivosdelmilenio.org.mx/), llamado “Metas Educativas 2021 La educación que queremos para la generación de los Bicentenarios”. Esto da significado a un futuro, a partir del año 2009 y hasta 2021, la gran mayoría de los países iberoamericanos recuerdan y conmemoran los doscientos años de su independencia, (México la logró en 1821). Este programa pretende establecer los objetivos que la educación iberoamericana debe alcanzar para el año 2021.

Veamos entonces algunos párrafos del proyecto, y con ello vislumbrar que nos espera en educación, estar preparados para lo futuro ya es para el docente una competencia que debe practicar a diario:

…Una de las señas de identidad del proyecto “Metas Educativas 2021: la educación que queremos para la generación de los Bicentenarios” es su carácter social y participativo. No se pretende solamente elaborar un elenco de metas e indicadores entre los Ministros de Educación Iberoamericanos, aprobado después por los Jefes de Estado y de Gobierno, sino incorporar al conjunto de la sociedad en el debate de las Metas y de sus Indicadores, en su refrendo, en su seguimiento posterior y en su compromiso activo para lograrlas.

Las políticas públicas se construyen desde una compleja agenda, la cual va filtrando las necesidades más apremiantes, pero en nuestro caso entender la aplicación de estas acciones nos llevaría a ser partícipe de los cambios que se generan y no como simplemente espectador, involucran en este proyecto a todos para lograr los objetivos, así que es la nueva dimensión del docente: conocer su verdadero entorno y los factores que lo modifican.

¿Cómo entonces un docente participa activamente? La respuesta no es complicada, basta con involucrarse en investigar fuera de la zona de confort, se trata de no esperar las noticias, sino asimilarlas desde el momento de su concepción.

Veamos ahora otro párrafo del citado documento para ir complicando este debate, ¿le parece a usted que la calidad de la educación cumple con las expectativas actuales del mundo globalizado?, creo que la respuesta es más que obvia, es más, es de las que mueve desde la mente más humilde hasta la de mayor alcance filosófico. De eso se trata esta reflexión de tener dos visiones, una aquí y otra del más allá. La calidad de la educación sigue siendo un reclamo que por múltiples factores los docentes de la educación pública enfrentamos a diario, observemos entonces de qué se trata para el año 2021:

Continuará...