El exceso de velocidad causó la muerte de dos jóvenes personas en plena zona urbana de Tepatitlán el pasado 12 de febrero.
Según reporte de Protección Civil, eran las 21:28 horas de aquel día cuando recibieron un llamado donde les informaban acerca de un percance vehicular que momentos antes se había suscitado sobre la avenida Luis Donaldo Colosio, por lo que hasta allá se dirigieron varios elementos de la corporación, así como de la Cruz Roja.
Fue a la altura de la curva de aquella avenida donde se encontró volcada y fuera de la cinta asfáltica una camioneta Chevrolet Tahoe, color azul marino, modelo 86 y placas JGK-1821, la cual presuntamente era conducida a exceso de velocidad al momento del accidente.
Dentro del vehículo se encontró sin vida el cuerpo de Mario Alberto Limón Aceves, de 23 años de edad, mientras que su acompañante Pedro Villalpando, de aproximadamente 18 años, se encontraba gravemente herido, por lo que fue trasladado de inmediato al Hospital Regional a bordo de una ambulancia de la Cruz Roja.
Sin embargo Pedro Villalpando dejó de existir camino al hospital a pesar de lo relativamente corto del trayecto, por lo que su cuerpo fue llevado directamente al Servicio Médico Forense, como minutos antes había corrido la misma suerte el cadáver de su compañero.
Tomó conocimiento de los hechos un agente del Ministerio Público de esta ciudad.
Según reporte de Protección Civil, eran las 21:28 horas de aquel día cuando recibieron un llamado donde les informaban acerca de un percance vehicular que momentos antes se había suscitado sobre la avenida Luis Donaldo Colosio, por lo que hasta allá se dirigieron varios elementos de la corporación, así como de la Cruz Roja.
Fue a la altura de la curva de aquella avenida donde se encontró volcada y fuera de la cinta asfáltica una camioneta Chevrolet Tahoe, color azul marino, modelo 86 y placas JGK-1821, la cual presuntamente era conducida a exceso de velocidad al momento del accidente.
Dentro del vehículo se encontró sin vida el cuerpo de Mario Alberto Limón Aceves, de 23 años de edad, mientras que su acompañante Pedro Villalpando, de aproximadamente 18 años, se encontraba gravemente herido, por lo que fue trasladado de inmediato al Hospital Regional a bordo de una ambulancia de la Cruz Roja.
Sin embargo Pedro Villalpando dejó de existir camino al hospital a pesar de lo relativamente corto del trayecto, por lo que su cuerpo fue llevado directamente al Servicio Médico Forense, como minutos antes había corrido la misma suerte el cadáver de su compañero.
Tomó conocimiento de los hechos un agente del Ministerio Público de esta ciudad.
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