El entusiasmo por su primer día de trabajo acabó en una tragedia


• Para Mario, de 17 años, era además su primer empleo

• Iban a Lagos cuando un tráiler mató a 8 e hirió a trece

Para los hermanos Carolina y Mario, de 20 y 17 años de edad, era su primer día de trabajo, para Mario de su primer trabajo, por lo que viajaban entusiasmados en el transporte de personal de la empresa Pirma, que en el camino chocó de frente contra un tracto camión y murieron junto con seis compañeros.

El tracto camión transportaba cartones para reciclar y el accidente ocurrió  en el punto conocido como Paso a Tlacuitapa, en el kilómetro 3.5 de la carretera que va de Unión de San Antonio a Lagos de Moreno. Ocho personas   muertas, todas pasajeros del transporte de personal,  y otras 13 resultaran lesionadas.

El accidente ocurrió a las 7 de la mañana cuando al parecer al tracto camión marca Kenworth con placas del estado de Michoacán se le descompuso la flecha, lo que provocó que el chofer perdiera el control del camión y se impactara de frente contra el vehículo de transporte de personal que llevaba a los empleados de la empresa de Lagos de Moreno a la localidad de Purísima del Rincón.

El conductor del carguero, de 67 años, quedó detenido y llevado a los separos municipales de Unión de San Antonio, mientras que el chofer del autobús perdió la vida en el choque. En el lugar perdieron la vida cinco hombres y tres mujeres, y de los heridos, seis fueron diagnosticados en estado grave y el resto de regular a leve.

Se solicitó Personal de Cruz Roja, Protección Civil de Lagos de Moreno, de San Diego de Alejandría, de Unión de San Antonio y ambulancias del Estado, de León y de Guanajuato.

Hermanos mueren, era su primer día de trabajo

Carolina y Mario Óscar, de 20 y 17 años perdieron la vida en el accidente, era su primer día de trabajo para ambos, pero para Mario era además el primer trabajo en su corta edad, su papá había firmado el permiso para que su hijo trabajara por ser menor de edad y la empresa Pirma lo había aceptado.

“La Peque” como le llamaban a Carolina ya había trabajado en una empresa de calzado, pero por estar cerca de su hermano buscó la vacante en la misma empresa y fue aceptada, por lo que ese día a las 6 am se despedían de sus papás y salieron de casa ubicada en la colonia Aurora, para subir al camión y sentarse atrás del chofer, iban sonrientes y felices por su primer día de trabajo juntos.

Tres horas después la familia se enteró del accidente y de la muerte de sus dos hijos, quienes fueron despedidos por sus  familiares, amigos y vecinos en la Parroquia del Señor de los Trabajos, para después sepultarlos en el Panteón Municipal de Lagos de Moreno.

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