Tiempos de alegría

San Diego de Alejandría y su fiesta

Por Oscar Maldonado Villalpando

Ya hemos dicho como este pueblo, en un momento crucial de su historia, eligió peregrinar bajo la protección de La Inmaculada Concepción. Cosa que se realizó en un solemene acto el 29 de septiembre de 1837. Este pueblo se llamaría San Diego de Alejandría y su protectora la Santísima Virgen.

La primera imagen fue una escultura pequeña. Pero bien pronto los vecinos quisieron una hermosa imagen, que fue confeccionada por el gran pintor y escultor don Hermenegildo Bustos.

Cuentan los antiguos que el artista pidió como modelos a varias de las jovencitas más hermosas de la población. En la imagen plasmó el rasgo más hermoso de cada una de las señoritas. Las manos las modeló de tal joven, la boca de otra, los ojos de otra más, etc. Resultó la escultura actual que es hermosísima.

Un poco más adelante, se publicó el dogma de La Inmaculada Concepción, así la devoción de esta comunidad se vio confirmada por la autoridad eclesiástica. La comunidad es floreciente, por esos años. Así se dio un hecho muy señalado. Este nueva comunidad es elegida para parroquia, supliendo a la antiquísima de Jalpa. Esto fue el 19 de enero de 1869. La ceremonia se realiza el 8 de marzo de 1869. El primer párroco es el que fuera vicario de Jalpa, don Justo Hernández. Las razones de este cambio son muy interesantes. Será asunto muy especial. La fiesta se tenía, como es lugar, el día 8 de diciembre. Pero uno de los pastores y el pueblo creyeron conveniente trasladar la fecha al 8 de enero. Así que desde el siglo antepasado la fecha es esta del día 8 de enero.

En esta comunidad han trabajado casi 85 sacerdotes, 23 párrocos y 62 vicarios. Esta es la razón por la que San Diego de Alejandría tiene su fiesta en las fechas señaladas. La fiesta patronal es tiempo de volver, es tiempo para regresar al terruño. Esto es algo muy valioso porque nos ayuda a rescatar identidad. Cada pueblo tiene su fiesta muy especial y esa fecha marca la vida de todos.

Por eso es importante recordar y tener en cuenta todo lo vivido. No es justo que seamos hombres sin historia. No debe ser que seamos producto de nuestro tiempo. Sabemos que el pasado ya se ha ido. No hemos vivir fuera de nuestro momento. Pero ese pasado es libro, son páginas muy valiosas que explican muchas cosas de lo vivido.

La fiesta patronal no es una fecha más, es un día en que las personas son llamadas a traves de la distancia como si las campanadas fueran allá, al lugar donde cada quien vive, y su voz calara a lo más profundo del corazón.

La fiesta inspira. Hay personas que escriben sus sentimientos, que hacen un corrido, que componen unas mañanitas a la Virgen, así ha sido en San Diego. Veremos luego ejemplos de estas composiciones inspiradas por el cariño a la Virgen, la Patrona.

Publicar un comentario

0 Comentarios